Lo que tu cabello dice sobre tu salud

En la diagnosis oriental, el pelo exterior del cuerpo tiene una relación directa y reveladora con el pelo interior, concretamente con los minúsculos pelillos, llamados “cilios”, que recubren el esofago y tracto digestivo.

En medicina oriental, creemos que la energía de los riñones, hígado y pulmones controla el crecimiento y la salud del pelo. Su calidad y cantidad dependen de nuestra salud general. Esto lo prueba el hecho de que -por mencionar un ejemplo- las personas que reciben tratamiento quimioterapéutico, pierden el cabello; la quimioterapia, que es tóxica para las células, daña en particular los riñones. ¿Cómo sucede? Una vez que los riñones están debilitados, son incapaces de proporcionar el ki (1) adecuado a todo el cuerpo, y esas zonas que no son realmente esenciales para la vida (entre ellas el cabello), son las últimas en ser nutridas; en consecuencia, se cae el pelo.
Los metales pesados y las substancias químicas -que resultan venenosas para nuestro cuerpo- dañan el hígado y también producen caída del cabello. Estas toxinas son nocivas especialmente para el hígado y los riñones, experimentando mucha dificultad para eliminarlos del cuerpo y así afectan a la calidad y el crecimiento del cabello.
Las algas, sobre todo las de la familia kelp, pueden contribuir eficazmente a eliminar los venenos químicos  y metales pesados. Estudios científicos han demostrado que el alginato de sodio, presente en la mayoría de las algas, enlaza con los metales pesados y sustancias químicas contaminantes. Una vez enlazado con ellos, los extrae de los tejidos y los lleva al intestino, donde pueden ser expulsados del cuerpo.
Así mismo, la energía del riñón nutre los órganos sexuales. Dado que el pelo está regido por los riñones, la medicina oriental siempre lo ha asociado con los órganos sexuales. Se cree entonces que el cabello de una persona revela así la salud y fortaleza relativas de sus órganos sexuales.

El cabello frágil puede ser consecuencia de un consumo excesivo de sodio (contenido en la sal), o alimentos de origen animal; en cualquiera de los dos casos, la energía del riñón resulta insuficiente.
Otra causa puede ser una carencia de minerales, sobre todo de yodo. Un mayor consumo de verduras y algas puede remediar fácilmente este problema.

El estado del pelo exterior revela también el estado de la vellosidad interior. Las puntas partidas o el cabello de rizos muy pequeños indica el estado de la vellosidad interior de los pulmones e intestinos. Cuando en la edad madura aparece vello en lugares donde no debería haber, es un indicador de que dentro del cuerpo también ocurre algo relacionado con el crecimiento del pelo. Por ejemplo, muchas mujeres desarrollan bigote. La zona de la boca está relacionada con el tracto digestivo y hasta los órganos sexuales. Por lo tanto, sabemos que hay exceso de cilios en alguna parte de esa zona del cuerpo. La presencia excesiva de cilios indica que la acumulación de mucosidad (mayormente provocada por el consumo de productos lácteos) ha alcanzado proporciones elevadas. Es decir: la alta cantidad de proteínas y mucosidad han dado origen a un mayor crecimiento de vellosidad dentro del tracto digestivo y/o de los órganos sexuales. Cuanta más cantidad de cilios se desarrolla dentro del cuerpo en estas zonas, más vellos aparecen en el exterior, en zonas diagnosticadas concretas. Cuando una mujer tiene presenta estos síntomas, probablemente sufre de condiciones indeseadas relacionados con su zona reproductiva, el ciclo menstrual -entre ellos el síndrome premenstrual- y otras complicaciones.

Una de las causas de la calvicie es el consumo excesivo de líquido. Cada pelo se asienta en un folículo, o ‘saquito’ que contiene aceite. Cuando el consumo de líquido excede la capacidad de los riñones para procesarlo, el líquido produce el ensanchamiento de folículo, lo que a su vez es causa de que el pelo caiga.
La calvicie suele presentarse en sectores concretos de la cabeza, ya sea en la parte anterior, junto a la frente o detrás. Si la calvicie aparece delante, la causa es el consumo excesivo de sustancias yin (líquidas), sobre todo bebidas gaseosas, jugos sintéticos y alcohol. Si aparece en la parte detrás o en el centro de la cabeza, la causa es yang (sólidos), es decir, consumo excesivo de sal, carne roja, huevos, quesos secos y pollo.
El pelo facial en los hombres puede ser señal de fuerza. Los hombres que tienen tupidas patillas por ejemplo, tienen el hígado y la vesícula biliar fuertes. Un bigote  tupido en un hombre puede indicar fuerza en la actividad digestiva y en los órganos sexuales.

El pelo y la piel nos dicen mucho acerca de nuestras fuerzas y debilidades naturales, pero cada uno de nosotros puede mejorar de modo espectacular si diariamente cuida de su vida, cuerpo y salud.

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1.- En la cultura china tradicional el ki o qi  (literalmente «Vitalidad, disposición de ánimo») es un principio activo que forma parte de todo ser vivo y que se podría traducir como “flujo vital de energía”.